La noche del viernes pasado fue genial y estupenda. No había llegado aun al trabajo y ya estaba deseando que fueran las 6:30 de la tarde para una jornada nocturna fenomenal; era como un crío en una tienda de juguete. No me importaba lo que pasara en el trabajo, la noche iba a ser fabulosa y así lo fue.
Había quedado con Puri y unas amistades, Karlo y Joanne, para filmar en vivo el espectáculo de luces de Saks Fifth Avenue y las vitrinas que engalanan a las tiendas de la 5ta Avenida. Desde que salí de mi centro de trabajo comencé a transmitir en vivo a través de Periscope, una aplicación que está amarrada a Twitter y en donde cualquier persona puede experimentar, a través de los ojos del que transmite, sus experiencia en cualquier otra parte del mundo. Al encontrarme con Karlo, él también comenzó a transmitir. Una vez Puri y Joanne se nos unieron, la transmisión ya era entre 4 personas con diferentes puntos de vista e interés. De repente amistades de Puerto Rico se conectaron y participaron con nosotros de lo fabuloso que fue esa noche.
Solo puedo decir que hacía tiempo no nos amanecíamos y andábamos por las calles de la gran ciudad de Nueva York a altas horas de la noche. Fue increíble poder hablar con gente de Argentina, Colombia y de otras parte del mundo, así como lograr que personas en la calle participaran con uno de una transmisión en vivo, parecíamos reporteros logrando que otros disfrutaran del esplendor navideño de Nueva York.
Definitivamente, Periscope es una aplicación que llegó para quedarse y estaremos haciendo uso de ella con mayor frecuencia. Probablemente yo estaré transmitiendo de vez en cuando durante el día en mi hora de almuerzo en Nueva York para que la gente vea la vida de los que trabajamos en la Gran Ciudad y lo que hacemos en nuestro tiempo libre.