Esto de trabajar por contrato con diferentes empresas de reclutamiento, a lo que yo llamo la profesión prostituida, tiene sus ventajas y sus desventajas. Empecemos por las desventajas:
Una de las principales es que es un fenómeno cíclico. Hace alrededor de dos años, Nueva York era el centro de los trabajos de document review. Desde hace unas semanas este boom de trabajo en idiomas y en inglés ha decaído. Su centro se ha desplazado a Washington DC, donde nos vamos a mudar. La otra desventaja es que una de estas agencias se pasa poniendo ofertas de empleo que pagan entre $25 o $28 por hora de trabajo y con un mínimo de diez a doce horas de trabajo por semana, incluyendo los fines de semana sin derecho a hora extra (lo que se llama en inglés a overtime); a esta agencia yo la he llamado la Walmart de document review. Este tipo de empresa se aprovecha del mercado lento y sabe que muchos abogados caerán en la tentación, porque no son muy cristianos, de trabajar para ella porque tienen cuentas que pagar y el costo de vida en la Gran Manzana no es barato. Estos abogados, en vez de boicotear a esta agencia, prefieren jugarle el juego y permitirles que le traten como Ben Hur cuando estaba en el barco romano de esclavos remando sin fuerza de voluntad y sin mostrar su odio por este tipo de explotación.
Pero no todo en la vida debe mirarse con negativismo. Lo bueno de este trabajo es yo escojo con quien trabajar y que proyectos selección; siempre tomo los que pagan más, español o portugués. En estos momentos, en que nos mudamos de la Gran Manzana, me da tiempo para buscar cajas, empacar, preparar la logística de la mudanza, mirar películas, leer, escribir y tocar la guitarra a mis anchas. Algo que no podía hacer hace unas semanas.
En estos días, en que he estado solo porque mi significant other se encuentra en España he optado por entrar en el período presidencial. Estas son las etapas de mi vida que he decidido denominar y que demuestran mi crecimiento y evolución como individuo. Otras etapas de mi vida fueron las siguientes: para inicios del dos mil, me encontraba en el período Napoleónico, devorando todo sobre esa época e incluso comprando soldados de plomo y un busto de Napoleón. En la década de los noventa leí todo sobre el existencialismo francés. Para los ochenta fue mi época clásica en que leía todo sobre los clásicos griegos y la historia de la civilización greco-romana. A esta ultima no puedo olvidar mi pelea y odio hacia el franquismo y la cual, de forma superficial en muchas ocasiones, surge en comentarios que publico en Twitter o base de alguna lectura que hago de vez en cuando en estos días.
Ayer estuve viendo diez documentales sobre Washington, John Adams, Jefferson, Van Buren, Johnson, Jackson, Lincoln, Cleveland, Teddy Roosevelt, LBJ y Richard Nixon. Todo estos documentales, en adición a los libros y podcasts, que he estado leyendo y escuchando, me han permitido entender la mentalidad evolutiva de los E.E. U.U. a través de sus primeros mandatarios. Es una lastima que en mis años de preparación escolar y universitaria estos personajes no fueran visitados desde una óptica fuera de los libros de textos usuales. Creo que mi período presidencial durará unos cuantos meses hasta que sentemos base en Washington DC. A lo mejor el estudio continuará o se detendrá para dar paso a otro período, como lo hacía Picasso. El tiempo o la fortuna de Machiavello dirá que rumbó tomará mi fortuna.
Ayer estuve viendo diez documentales sobre Washington, John Adams, Jefferson, Van Buren, Johnson, Jackson, Lincoln, Cleveland, Teddy Roosevelt, LBJ y Richard Nixon. Todo estos documentales, en adición a los libros y podcasts, que he estado leyendo y escuchando, me han permitido entender la mentalidad evolutiva de los E.E. U.U. a través de sus primeros mandatarios. Es una lastima que en mis años de preparación escolar y universitaria estos personajes no fueran visitados desde una óptica fuera de los libros de textos usuales. Creo que mi período presidencial durará unos cuantos meses hasta que sentemos base en Washington DC. A lo mejor el estudio continuará o se detendrá para dar paso a otro período, como lo hacía Picasso. El tiempo o la fortuna de Machiavello dirá que rumbó tomará mi fortuna.